Mátame
Mátame.
Toma el arma con la que quieres desaparecer y elimina mi existencia. Vuélame los cesos, que haya una gran piñata de sangre en el aire.
Mírame a los ojos cuando dispares, mis ojos fríos y seguros.
Pues prefiero abandonar esta vida sin justificación antes que vivir sin la justificación de guardarte.
Mátame para que veas lo que sintiera si te pierdo, lo que voy a sentir cuando sepa que no pude evitar quedarme sin lo que más aprecio en el mundo.
Te ruego que me asesines. Oh perla magnífica. Con la firme certeza de que al sentir lo que siento cuando veo que te alejas, desearás nunca alejarte y entrelazar tus costillas con mi corazón.
17/08/1?
Por alguna razón no estaba aquí ni entre mis archivos. Aunque es de los peores en cuánto a composición y palabras es de los que más carga emocional tienen y de mis favoritos en toda mi vida. No hay forma de que este comentario explique todo el amor y sacrificio que me recuerdan esas palabras, es simplemente inefable, pero con suficiente resiliencia todo sale mejor.
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